Gente Impresentable

Hoy he soñado contigo. Me he despetado y el sueño se mantenía de forma nítida en mi memoria, como si fuese un recuerdo… Que digo yo que qué más dará la diferencia, si los recuerdos son pasados, y el pasado ya no existe…
Estabas sentado, sonriente, y entonces yo te veía y sonreía feliz: Que ganas tenía ya de verte.
Me dabas un abrazo, que bien saben tus abrazos, porque los das con ganas, y aprietas, y te siento cerca.
Y entonces me besabas. Besas bien hasta en sueños.
¿Te acuerdas la primera vez que nos besamos? Seguramente no, porque ibas muy borracho, y yo no quería besarte por ese motivo, pero la carne es débil… Y también guardo amargo el recuerdo de la última vez que me dieron ganas de besarte. La gente tendría que aprender a pedir aquello que quiere con mayor facilidad, que miedo nos dan los noes…
Entonces me he despertado, y era bien temprano. Que rabia dan esos sueños en los que te despiertas y piensas “que bien que estaba yo dormidita”  Y no que ahora pienso que era todo producto de mis mundos oníricos… Que mala suerte. Bueno, en la vida real también…
Me he despertado con ganas de llamarte
Con ganas de escribirte esto… De decirte que es para ti…
Y que tengo muchas ganas de verte…
Pero no sé si es real.


1 comentario:

  1. Gracias por haberte pasado por mi blog, con mucho gusto me quedo por aquí..., me gusta lo que escribes...
    Un beso!

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